
El menor consumo de combustible de un coche depende de aspectos como el tipo de motor, el tamaño del vehículo o el combustible empleado, entre otros.
Conoce las diferentes opciones de movilidad sostenible: eléctricos, híbridos, de hidrógeno, a gas o solares. Descubre sus características, consumos y etiquetas ambientales para elegir con criterio en 2025.
La movilidad sostenible ofrece hoy más alternativas que nunca. Además de los coches 100% eléctricos, existen híbridos, híbridos enchufables, vehículos a gas, de hidrógeno o incluso solares. Cada tipología tiene sus ventajas, limitaciones y costes asociados. En esta guía analizamos los principales tipos de vehículos, el etiquetado ambiental, su consumo y qué debes tener en cuenta a la hora de decidir qué coche comprar.
No todos los vehículos sostenibles son iguales. El mercado ofrece distintas opciones según las necesidades de autonomía, uso diario o presupuesto.
Coches eléctricos: funcionan exclusivamente con batería y no emiten gases contaminantes durante la conducción.
Híbridos: combinan motor de combustión y eléctrico, ideales para ciudad y trayectos cortos.
Híbridos enchufables (PHEV): permiten circular en modo eléctrico y se recargan en la red.
Antes de decidir, conviene comparar autonomía, costes de uso y disponibilidad de puntos de recarga.
Tipo de vehículo | Autonomía media real estimada (2025) | Coste estimado por 100 km (uso doméstico / tarifa estándar) | Ventajas principales | Limitaciones destacables |
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Eléctrico puro (BEV) | 350-600 km (dependiendo de modelo) | ~ €3-€5 si se carga en casa con tarifa favorable | cero emisiones locales, coste de “combustible” muy bajo, menos mantenimiento | Autonomía real puede bajar si se usan climatización/velocidades altas; infraestructura de recarga rápida no siempre disponible |
Híbrido no enchufable (HEV) | 600-900 km combinados (gasolinas + electricidad regenerada) | Costes mixtos: combustible + electricidad mínima; difícil de comparar directamente | Más flexibilidad, menos preocupación por autonomía; menor coste frente a eléctrico puro si hay poca infraestructura | Aun usa combustibles; emisiones medias; costes de mantenimiento del motor térmico |
Híbrido enchufable (PHEV) | 40-80 km en modo eléctrico + autonomía total 600-800 km aprox. | Electricidad + combustible; coste eléctrico similar al BEV para esos primeros kilómetros | Buena transición: permite muchos usos eléctricos y respaldo térmico para viajes largos | Necesita recarga frecuente para aprovecharlo; más caro que un híbrido no enchufable |
Vehículos a gas (GNC/GLP) | ~ 400-600 km, dependiendo del tanque y presión de la red de gas | Coste variable, pero generalmente menor que gasolina; ~ €5-€7/100 km si el gas es económico | Menor emisión de partículas/NOx en algunos casos; coste de operación inferior al de gasolina | Red de estaciones limitada; emisiones no nulas; mantenimiento térmico habitual |
Hidrógeno (FCEV) | Varía mucho: algunos modelos ya prometen 500-700 km reales; infraestructura aún muy emergente | Costes de repostaje bastante elevados; difícil confirmar valores homogéneos | Repostaje rápido; autonomía alta; cero emisiones si el hidrógeno es verde | Poca infraestructura; precio del hidrógeno verde alto; coste inicial elevado |
Elegir qué coche eléctrico o sostenible comprar implica tener en cuenta:
Uso principal (ciudad, carretera, trayectos largos).
Autonomía real frente a la teórica.
Coste de adquisición y mantenimiento.
Beneficios fiscales y ayudas vigentes.
Disponibilidad de infraestructura de recarga o repostaje.
Una elección informada evitará sorpresas y permitirá maximizar el ahorro a medio y largo plazo.
El etiquetado ambiental de la DGT clasifica los vehículos según sus emisiones. La etiqueta Cero ofrece ventajas en zonas de bajas emisiones, peajes o aparcamiento regulado.
En paralelo, el consumo real depende de la eficiencia del motor, la batería y el estilo de conducción. Los vehículos más ligeros y optimizados consumen menos energía y reducen el coste por kilómetro.
Aunque los eléctricos puros dominan la conversación, hay otras tecnologías que también avanzan hacia la descarbonización:
Hidrógeno: repostaje rápido y gran autonomía, aunque la infraestructura aún es limitada.
Gas (GNC y GLP): combustibles más limpios y económicos que la gasolina o el diésel, con buena red de estaciones.
Coches solares: aún en fase experimental, pero prometen aprovechar la energía del sol para extender la autonomía.
Estas alternativas pueden ser interesantes para flotas, transporte pesado o usuarios que no encuentran aún encaje en el eléctrico puro.
En este apartado encontrarás respuestas a las preguntas más frecuentes planteadas por los usuarios sobre la sostenibilidad y las tipologías de vehículos eléctricos
El eléctrico funciona solo con batería, mientras que el PHEV combina motor de combustión y eléctrico, y puede enchufarse a la red para aumentar la autonomía en modo eléctrico.
Sí, emiten únicamente vapor de agua, pero su sostenibilidad depende de cómo se produzca el hidrógeno (verde, azul o gris).
Permite acceder sin restricciones a las Zonas de Bajas Emisiones, descuentos en peajes y aparcamiento gratuito o reducido en muchas ciudades.
Los coches a gas (GNC/GLP) suelen ser la opción más asequible a corto plazo, con precios de combustible inferiores al diésel y la gasolina.
La mayoría ofrece entre 300 y 500 km reales, suficiente para uso diario y viajes de media distancia.
La movilidad sostenible no se limita al coche eléctrico. Existen híbridos, enchufables, de hidrógeno, a gas y hasta solares, cada uno con ventajas y retos específicos. Conocer las tipologías, el etiquetado ambiental y el consumo te ayudará a elegir el vehículo que mejor se adapte a tu estilo de vida.
Si buscas más información sobre movilidad y vehículos eléctricos, en nuestro blog tenemos una sección específica dedicada a ello en la que te compartimos información de interés y relevancia, así como las últimas novedades sobre cambios en precios o en la normativa vigente.
El menor consumo de combustible de un coche depende de aspectos como el tipo de motor, el tamaño del vehículo o el combustible empleado, entre otros.
Los coches solares convierten la energía solar en electricidad para autopropulsarse. Apoyan la movilidad sostenible y respetuosa con el medioambiente.
Los coches a gas pueden ser de gas licuado del petróleo o de gas natural. Son etiqueta ECO según la DGT y reducen las emisiones de gases nocivos.