Cómo cambiar de compañía de gas: pasos, consejos y documentación

Cambiar de compañía de gas es un trámite completamente gratuito y muy habitual en el sector de la energía, sobre todo cuando se trata de mejorar la tarifa de gas contratada. ¿Qué necesitas para llevar a cabo con éxito este trámite? Te lo contamos.

¿Cómo puedes cambiar de compañía de gas?

Cambiar compañía de gas

Para cambiar de compañía de gas lo que tienes que hacer es ponerte en contacto con la nueva comercializadora con la que quieres contratar, será ella quien te guiará durante el proceso. De hecho, simplemente te pedirán una serie de documentos e información y se encargarán de todos los trámites. 

Te recordamos que el cambio de compañía de gas debe hacerse con el consentimiento expreso del titular del contrato gasístico, en caso de que no lo seas. El ejemplo más común de esta situación se produce cuando eres el inquilino de la vivienda, pero los suministros siguen a nombre del propietario.

Hay que destacar, antes de seguir adelante, que el procedimiento de cambio de compañía proveedora de gas es completamente gratuito, ya que se entiende como un derecho básico de todos los consumidores. Es además un trámite que puede realizarse en cualquier momento, siempre que tu actual contrato de gas no cuente con algún compromiso de permanencia que suponga una penalización si lo finalizas antes de tiempo.

Así, si quieres cambiar de compañía de gas, nuestra primera recomendación es que revises todos los detalles del contrato con tu compañía actual, para que no te encuentres con problemas inesperados al iniciar la solicitud de cambio.

6 consejos al cambiar de compañía de gas

Antes de decidirte a cambiar de compañía suministradora de gas te proponemos que revises los seis puntos siguientes que, sin duda, te ayudarán en este proceso:

  1. Revisa si tienes alguna factura pendiente de pago con la anterior compañía. En caso de que exista alguna deuda a tu nombre, no podrás hacer efectivo el cambio hasta que hayas abonado todos los recibos pendientes a la antigua marca.

  2. Compara los precios y servicios de al menos 2 empresas del ramo para ver si existen grandes diferencias entre ambas.

  3. Infórmate de si tienes derecho al bono social térmico, que ofrece una tarifa de luz y gas con importantes descuentos para los colectivos más vulnerables.

  4. Examina en detalle los compromisos de permanencia de las ofertas de las compañías. Puede que si no los revisas, acabes llevándote una desagradable sorpresa.

  5. Guarda o imprime una copia de la oferta comercial y del contrato de gas. Antes de darte de baja de tu actual servicio de suministro de energía, asegúrate de entender todos los detalles de la nueva tarifa que vas a contratar.

  6. Recuerda que si realizas la contratación a distancia (por teléfono o por internet) dispones de hasta 14 días de plazo para desistir del nuevo contrato de gas sin tener que dar ninguna justificación, en caso de haberlo pensado mejor.

¿Qué compañía de gas elegir?

Antes de iniciar el cambio de compañía de gas, presta atención a estos factores que te van a ayudar a discriminar entre las ofertas que puedes encontrar en el mercado:

  • Elige entre compañías de referencia del mercado regulado (con tarifas reguladas por el Gobierno llamadas Tarifas de Último Recurso o TUR), o bien proveedores del mercado libre con condiciones y tarifas específicas y más flexibles.

  • Estudia los descuentos y promociones que algunas empresas te proponen.

  • Valora si necesitas una mayor personalización gracias a servicios complementarios como el de mantenimiento de tu instalación, y que pueden incluir además las revisiones anuales obligatorias.

  • Utiliza las plataformas que te proporcionan herramientas útiles para comparar las tarifas y los servicios de gas.

  • Selecciona tarifas adaptadas a tu perfil de consumidor. Tu consumo es bajo si usas el gas para la cocina y Agua Caliente Sanitaria, y va a ser más elevado si además necesitas el gas para la calefacción.

  • Busca compañías que cuenten con un buen servicio de atención al cliente, ya que puede marcar la diferencia, sobre todo a la hora de resolver un problema o realizar una reclamación de la factura de gas por importes indebidos o cortes de suministro.

Documentación necesaria para cambiar de compañía de gas

Si quieres cambiar de compañía de gas, sea de mercado libre o de regulado (tarifas TUR), deberás facilitar a la nueva empresa con la que quieras contratar el servicio los siguientes datos y documentos: 

  1. Nombre, apellidos y DNI del titular del contrato de gas.

  2. Datos de contacto: teléfono o correo electrónico.

  3. Código Universal del Punto de Suministro (CUPS). Lo podrás encontrar en el contador de gas de tu inmueble o detallado en cualquiera de tus facturas.

  4. Dirección exacta de la vivienda o local donde se va a cambiar el suministro.

  5. Datos de la cuenta bancaria en la que te cargarán los recibos.

Es obligatorio que proporciones esta información si quieres que el cambio de compañía se lleve a cabo.

Respecto al número CUPS te recordamos que es invariable –funciona como si fuera el DNI de tu instalación de gas o luz–, por lo que aunque te cambies de compañía, este se mantendrá. 

Otro aspecto a destacar es que para efectuar este cambio NO es necesario dar de baja el suministro, por lo que no hay riesgo de que al cambiar de compañía de gas te quedes sin él en algún momento. 

¿Cuánto puedes tardar en completar el cambio de compañía de gas?

El plazo máximo para realizar el cambio de compañía comercializadora de gas es de 21 días, o lo que es lo mismo, tres semanas. Además, la anterior compañía de gas deberá enviarte su última factura en un plazo máximo de 6 semanas a partir de la finalización del suministro.

¿Debes pagar por cambiarte de compañía de gas?

En principio cambiar de compañía de gas es un trámite gratuito. Sin embargo, antes de realizar el cambio comprueba que en tu contrato actual no tengas una cláusula de permanencia, puesto que si es así, la compañía puede aplicarte una penalización económica. 

Podría ocurrir que algunas compañías puedan cobrar un coste administrativo por el cambio, pero no es habitual. 

Lo que sí puede pasar es que debas hacer algún tipo de modificación en tu instalación, lo que podría conllevar unos gastos asociados para ti.

¿El cambio de compañía de gas implica un cambio de contador?

No, el cambio de compañía de gas no conlleva un cambio de contador. Debes tomar en consideración que el contador es responsabilidad de la distribuidora si es alquilado o del cliente en caso de haberlo adquirido, como ocurre con la electricidad 

Ahora bien, lo que sí puede ocurrir es que, si el contador está averiado o se ha quedado obsoleto, la distribuidora pueda proceder a su sustitución, pero esto no está relacionado directamente con el cambio de compañía.

En este mismo orden de cosas, si el contador es alquilado, al cambiar de empresa suministradora se te va a cobrar su alquiler en tus nuevas facturas como venía haciéndolo la anterior compañía.

Cambio de compañía de gas en un piso de alquiler

Si eres inquilino de una vivienda o local comercial y quieres cambiar de compañía suministradora de gas para acogerte a una mejor tarifa o servicio, puedes hacerlo siempre que previamente hayas procedido a hacer un cambio de titularidad. 

En esta página te explicamos en detalle cómo cambiar el titular del gas.

Una vez seas titular del contrato de gas de la vivienda, podrás realizar el cambio de comercializadora, ya que como usuario final tienes derecho a elegir libremente la empresa que te preste este servicio, así como cambiar de tarifa o cualquier otra modificación relacionada.

En cualquier caso, te recomendamos que examines en detalle tu contrato de arrendamiento, por si hubiera alguna cláusula que indicara la posibilidad o imposibilidad de cambiar de compañía de suministro de luz o gas.

¿Puedo cambiar de compañía de gas teniendo una deuda?

Una duda habitual entre los usuarios del suministro de gas es si se puede cambiar de compañía de gas teniendo deudas en otra. La respuesta es clara al respecto: puede ser posible, pero la mayoría de las compañías pueden bloquear el cambio si tienes una deuda activa con tu actual proveedor de energía.

Además, en casos en los que tienes deudas importantes y se te incluye en listados de morosos, el cambio puede ser aún más complicado. 

Si tienes una deuda con tu suministradora actual puedes intentar negociar el pago fraccionado de la misma para desbloquear, si procede, la posibilidad de cambio de suministradora.

Sea como sea, procura ponerte al día cuanto antes en lo que respecta a las facturas atrasadas porque las deudas pueden llegar a entrañar recargos por impagos, cortes de suministro o acciones legales.

Ventajas de cambiar de compañía de gas

Una de las ventajas de cambiar de compañía es que puedes acceder a una mejor tarifa o una tarifa más adaptada a tus necesidades que favorece el ahorro de gas. 

Sumado a ello, puedes beneficiarte de ofertas de bienvenida interesantes que van a reducir tu factura energética y de servicios complementarios con precios especiales para las revisiones de gas obligatorias, por ejemplo.

Preguntas frecuentes relacionadas

¿Es posible ahorrar si cambio el contrato del gas?

La respuesta rápida a esta pregunta es “sí, al cambiar el contrato del gas puedes ahorrar siempre que se produzcan una serie de circunstancias”. 

Si entramos a desarrollar un poco más en profundidad nuestra respuesta, tenemos que el ahorro en la factura del gas por cambio de contrato llega siempre que puedas acceder a unas tarifas de mercado, en concreto de la competencia, que mejoren las que tienes contratadas. 

El hecho extendido de permanecer en una compañía para evitar los trámites de cambiar de una a otra, juega en contra de los consumidores que, en ocasiones se pueden estar cerrando la puerta a obtener condiciones ventajosas por no indagar en las últimas ofertas del mercado gasístico. 

Acceder a las promociones y ofertas que las compañías ponen a disposición de los nuevos clientes puede suponer un ahorro considerable en tu estrategia de recorte de gastos domésticos. Eso sí, no olvides comprobar detenidamente las condiciones del nuevo contrato para no lamentar situaciones desfavorables. 

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