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Normativa de chimeneas en viviendas unifamiliares y edificios

La normativa de chimeneas en viviendas unifamiliares tiene por objetivo garantizar la máxima eficiencia de estos sistemas de calefacción, garantizando la seguridad de las personas.

Considera que una instalación defectuosa o un mal uso de las chimeneas de gas o de leña que generan una combustión pueden originar riesgos como incendios o intoxicaciones por gases tóxicos, entre otros peligros.

Por sus importantes implicaciones, tanto a nivel medioambiental como de seguridad, en este artículo vamos a abordar la normativa vigente para chimeneas en viviendas unifamiliares y edificios, explicando las claves que debes conocer.

Chimeneas en viviendas y edificios: normativa vigente en España

Normativa chimeneas viviendas unifamiliares

En España, la normativa de chimeneas en viviendas y edificios viene regulada por 2 documentos básicos que establecen los requisitos de su instalación y que te detallamos seguidamente:

  • El Código Técnico de la Edificación (CTE). Busca garantizar que todas las instalaciones térmicas, incluidas las chimeneas, proporcionen las condiciones adecuadas en materia de confort, seguridad y eficiencia energética.
  • El Reglamento de Instalaciones Térmica (RITE).  Establece requisitos como la altura y el sistema de evacuación de humos. Estas medidas tienen como objetivo no comprometer la calidad del aire y que las emisiones se dispersen adecuadamente.

Como complemento, puedes completar la información con la Guía Técnica de Instalaciones de Calefacción Individual del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE). En ella vas a encontrar información relevante y requisitos para mejorar la seguridad, eficiencia energética y ahorro en instalaciones de calefacción y chimeneas.

Normativa para chimeneas en viviendas unifamiliares: claves

La normativa para chimeneas en viviendas unifamiliares se centra en aspectos como los que puedes descubrir en la siguiente enumeración:

  • Salida de humos. Las chimeneas de combustión deben disponer de salidas de humo adecuadas a sus características. Por ejemplo, la salida de humos debe instalarse por norma general al menos a 2,20 metros del suelo si el edificio tiene solo una planta. Si se pone en una pared, debe estar separada al menos por 40 centímetros de una ventana u otras aberturas para evitar que los gases de combustión vuelvan a entrar en el edificio.
  • Altura mínima. La salida de humos debe sobresalir al menos 1 metro por encima de la cubierta de la vivienda para evitar la acumulación de gases tóxicos, y cumplir con la distancia de seguridad con respecto a los edificios colindantes. Además, de tener que situarse a más de 2,5 metros de cualquier otro elemento.
  • Materiales. Deben estar construidas con materiales resistentes al fuego y a la corrosión y deben adaptarse al tipo de chimenea. Algunos ejemplos son el ladrillo refractario, el acero inoxidable o un material vitrificado, entre otros.
  • Distancia de seguridad. Se debe respetar una distancia mínima entre la chimenea y materiales inflamables, techos, paredes o vegetación cercana para prevenir incendios.
  • Inspecciones y mantenimiento. Las chimeneas deben pasar inspecciones periódicas que certifiquen su correcto funcionamiento, así como asegurarse de que cumple con los requisitos de seguridad.

Nueva normativa para las chimeneas de leña

Con la creciente preocupación por las emisiones de gases contaminantes, los nuevos sistemas de leña deben cumplir criterios de eficiencia energética cada vez más estrictos con el fin de garantizar un uso sostenible de los recursos.

En otras palabras, deben aprovechar mejor el calor y reducir las pérdidas de energía.

Por otro lado, estas chimeneas deben reducir la emisión de partículas contaminantes gracias a la instalación de filtros.

Normativa para chimeneas en comunidades

En el supuesto de que vivas en un piso y desees instalar una chimenea de leña o de gas, puedes hacerlo siempre que cumplas con una serie de requisitos de la legislación vigente y de la comunidad de propietarios.

Para empezar,  y de acuerdo con lo estipulado en la Ley de Propiedad Horizontal, en el caso de que se realice cualquier modificación que afecte a los elementos comunes, se necesita la aprobación de la Junta de vecinos.

Dado que una chimenea con combustión requiere de una salida de humos que puede afectar a elementos como la fachada, el tejado o el patio de luces debes obtener la aprobación de la comunidad por unanimidad, por norma general.

No obstante, puede darse el caso de que, según los Estatutos de la comunidad y del título constitutivo, se requiera simplemente una mayoría de tres quintos de los propietarios que supongan la representación de las tres quintas partes de las cuotas de participación.

Más allá de este aspecto, la chimenea debe cumplir con el CTE y las normativas locales que se puedan aplicar y que pueden variar de una Comunidad Autónoma a otra en cuestiones como la altura mínima o la distancia de seguridad de la evacuación de gases.

¿Qué tipos de chimeneas no están sujetas a esta normativa?

Si no puedes cumplir con los requisitos que acabamos de compartir contigo, toma nota de las chimeneas alternativas sin combustión que puedes instalar en tu vivienda:

  • Chimeneas decorativas. No emiten calor, solo aportan efectos luminosos que simulan la llama.
  • Chimeneas eléctricas. Funcionan como una estufa eléctrica, por lo que no necesitan almacenar combustible o leña.
  • Chimeneas de bioetanol. Su materia prima es un combustible renovable que funcionan al quemarse, pero sin generar humos.

Al no necesitar una salida de humos, estas chimeneas son una alternativa si no puedes instalar una de leña o de gas.

En este sentido, cabe recordar que en el caso concreto de las chimeneas de gas natural, estas pueden ser una buena alternativa porque, si bien es cierto que necesitan una salida de humos, no es necesario que se sitúe en el techo, sino que sea de tipo coaxial, como las que se instalan para las calderas de condensación. Esto facilita que pueda instalarse en un piso, por ejemplo.

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