Qué es una tarifa indexada de luz y cómo saber si es rentable
La tarifa indexada de luz propone a los consumidores precios fijados a diario en el mercado eléctrico, por lo que el precio que vas a pagar va a depender del coste real del mercado eléctrico mayorista.
Este tipo de tarifas puede ofrecer ventajas con respecto a las fijas, pero también presentan mayores riesgos frente a la volatilidad de los precios del pool eléctrico.
Para saber si es rentable es conveniente analizar tu consumo, las condiciones del mercado y comparar las alternativas a tu alcance.
¿Qué es una tarifa indexada de luz?

La tarifa indexada de luz es una tarifa a precio de mercado que se basa en un contrato en el que el precio que el consumidor paga por kilovatio-hora (kWh) se establece en función del mercado mayorista de la electricidad o pool eléctrico.
En otras palabras, el precio de la electricidad que vas a ver reflejado en tu factura va a encontrarse supeditado al coste real de la luz en cada momento, precio al que la comercializadora puede añadir un margen de beneficio por ofrecer este servicio, según el caso.
Esta dinámica te permite ahorrar cuando la energía es más barata, pero te expone a fluctuaciones que pueden encarecer tu factura si los precios suben.
En España, el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC) que solo ofrecen las comercializadoras de referencia bajo la regulación del Gobierno, es un ejemplo de tarifa indexada. En esta tarifa, los precios los determina a diario el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE). Aquí puedes conocer los precios diarios de la luz para que te hagas una idea.
Ahora bien, este tipo de tarifas también las puedes encontrar en el mercado libre, con la diferencia frente al regulado de que el margen comercial no está regulado, lo que quiere decir que cada comercializadora tiene la libertad de aplicar el que considere y ofrecer diferentes modelos de facturación.
En definitiva, los usuarios tienen la libertad de contratar tarifas indexadas en el mercado regulado y en el libre, de acuerdo de sus preferencias y necesidades.
¿Cómo funciona el establecimiento del precio por kilovatio-hora?
El Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE) fija los precios de la tarifa indexada a diario mediante una subasta de luz en la que las empresas productoras establecen precios mínimos de venta, y las comercializadoras precios máximos de compra.
Por este motivo, se produce lo que se conoce como una casación, es decir, un ajuste entre la oferta de los productores y la demanda de las comercializadoras que sirve para establecer el precio final de la electricidad.
Anteriormente (hasta diciembre de 2024), el precio se establecía cada hora, por lo que el resultado eran 24 precios diferentes estipulados el día previo, aunque en el mismo día podían darse pequeños ajustes para adaptarse a la situación real del mercado eléctrico.
Sin embargo, desde la Resolución de 3 de octubre de 2024, de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) este procedimiento se ha modificado (en concreto los procedimientos de operación eléctricos 14.1 y 14.4) y los precios se establecen ahora con medidas cuarto-horarias, esto es, cada 15 minutos (ISP15).
En el cálculo se aplican precios marginales del mercado diario, y de los servicios de balance según desvíos y activaciones. Con ello se consigue una mayor precisión y una mejor alineación con la normativa europea.
Los factores que influyen a la hora de fijar el precio por kilovatio-hora son las fuentes de energía, la demanda del momento y la disponibilidad de generación. Esto explica que los días en los que hay una demanda alta y poca generación de energías renovables, los precios tienden a subir.

Tarifa indexada vs. tarifa fija: principales diferencias
A la hora de valorar si una tarifa indexada te conviene es preciso que conozcas las diferencias con la tarifa fija, que es otra opción a la que puedes acceder.
Te hemos preparado una pequeña tabla con las diferencias más importantes:
Aspecto |
Tarifa indexada |
Tarifa fija |
---|---|---|
Precio del kWh |
Tiene un precio específico cada 15 minutos, en función del mercado mayorista de la electricidad. |
Ofrece un precio estable durante todo el contrato, por lo que no le influyen los cambios del mercado. |
Referencia |
Se basa en el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) en el mercado regulado, o en el precio mayorista, al que se puede sumar una comisión para la comercializadora en el mercado libre. |
Cada comercializadora fija el precio según su política interna, pudiendo aplicar descuentos específicos y los gestos comerciales que crea convenientes. |
Estabilidad y riesgo |
La estabilidad es baja, porque la factura sube o baja según la evolución de los precios de la luz en el mercado. Por este mismo argumento, el riesgo es también alto. |
La estabilidad es alta, ya que pagas lo mismo independientemente de las variaciones del mercado, y por eso mismo, el riesgo es bajo. |
Ahorro potencial |
Si puedes consumir la mayor cantidad de luz en las horas valle, el ahorro es importante. |
Es menor porque en periodos de precios bajos en el mercado, el precio puede ser superior. Sin embargo, se puede abaratar el coste de la luz con descuentos u ofrecer servicios complementarios. |
Bono social eléctrico |
Disponible únicamente en tarifas reguladas indexadas para consumidores vulnerables que cumplan con los requisitos. |
No está disponible en tarifas fijas del mercado libre. |
Uno de los aspectos más importantes que debes considerar es que si contratas una tarifa de luz indexada puedes pagar menos en un mes con precios bajos, pero más en un mes de invierno con picos de demanda, por ejemplo.
En cambio, con una tarifa fija no vas a verte expuesto a fluctuaciones, pero tampoco vas a beneficiarte de las posibles bajadas en los precios ni vas a poder solicitar el bono social eléctrico, ni el térmico puesto que va relacionado.
¿Cuándo es rentable una tarifa indexada?
Una tarifa indexada, a tenor de lo comentado hasta el momento, resulta rentable cuando los precios de la energía son bajos y puedes adaptar tu consumo a las horas más baratas.
En contrapartida, cuando los precios son altos o muy estables al alza, puede que una tarifa fija sea más interesante para ahorrar en tu factura de la luz.
¿Cómo saber si una tarifa indexada te conviene?
La mejor manera de saber si una tarifa indexada va a ser beneficiosa para ti es analizando tus hábitos de consumo. Para ello:
Revisa el histórico de tu consumo y fíjate en qué horas consumes más electricidad. En muchos casos, desde tu área de cliente puedes acceder a tu curva de consumo en intervalos horarios seleccionando diferentes periodos.
Compara los precios de varias comercializadoras de tarifas fijas con los del precio diario del pool eléctrico.
Recuerda incluir los costes que se suman al precio de la luz como peajes, cargos, márgenes de la comercializadora e impuestos. En ese sentido, es importante que entiendas la factura de la luz.
Piensa si puedes adaptar horarios a los tramos más económicos o solicita el asesoramiento de tu comercializadora para maximizar el ahorro energético en tu hogar.
Herramientas para tomar la decisión correcta
Tomar una decisión informada es clave para que puedas encontrar la mejor tarifa de luz para ti. Por esta razón, utiliza herramientas como los comparadores online como el que te propone la CNMC, que te permite hacer comparaciones mensuales o anuales.
Si dispones de una instalación de autoconsumo, también es interesante que utilices simuladores de eficiencia energética que te permiten establecer una estrategia de gestión de la energía producida para optimizar su rendimiento y potenciar el ahorro en tu factura de luz.
Entonces, ¿te conviene una tarifa indexada de luz?
Si eres un consumidor flexible, es decir, tienes la capacidad de concentrar la mayor parte de tu consumo en las horas en las que la electricidad es más barata, la tarifa indexada de luz es una buena opción para ti.
Ahora bien, si necesitas poder prever tu gasto con antelación, y no tener que preocuparte de las posibles alteraciones del mercado, una tarifa fija puede ser más conveniente.
Lo importante, como ves, es contratar una tarifa de luz que responda exactamente a tus necesidades.