
Las baterías de coches eléctricos son elementos claves cuyas características es preciso conocer. Influyen en el precio del coche y su autonomía.
Las baterías de los coches eléctricos son el componente central de este tipo de vehículos e influyen en aspectos determinantes como el precio del vehículo.
Por este motivo, esta tecnología se encuentra en constante crecimiento para salvar retos como el aumento de su rendimiento o la optimización de su fabricación y posterior reciclado.
Las baterías de los coches eléctricos están relacionadas con características esenciales como el tiempo de carga y la autonomía, por lo que te hemos preparado un contenido especial que se centra en sus características y tipos.
Las baterías de coches eléctricos son almacenes o acumuladores de energía eléctrica que permiten que el coche se desplace sin utilizar combustibles, u optimizando el uso del combustible en el caso de los coches híbridos.
En otras palabras se trata del equivalente al depósito de combustible de un vehículo de combustión y su funcionamiento se basa en una reacción que convierte la energía química en eléctrica.
Su objetivo principal es que el coche funcione de manera eficiente y ecológica, impulsando la transformación del parque automovilístico hacia una movilidad sostenible.
Además, ofrecen una solución más económica comparada con el uso de combustibles fósiles, así como un menor mantenimiento que, a largo plazo, equilibra la inversión inicial.
Estas baterías se pueden cargar con enchufes tipo Skudo, como cualquier otro equipamiento eléctrico, o bien en puntos de carga públicos o privados que optimizan el proceso.
Por otro lado, en la mayoría de los casos, cuentan con un sistema de recuperación de energía mediante la frenada, que facilita que el coche eléctrico sea una gran opción en vías urbanas.
Conocer las características de las baterías de los coches eléctricos te va a ayudar a elegir el vehículo que mejor se adapte a tus necesidades.
El peso y el tamaño están relacionados con la densidad de la batería, que es la energía por unidad de peso (gravimétrica) o de volumen (volumétrica), expresadas respectivamente en vatios hora por kilogramo (Wh/kg) o vatios hora por litro (Wh/l).
Fabricantes e investigadores intentan conseguir la mayor densidad de energía posible para optimizar los ciclos de carga para intentar igualar los precios entre vehículos eléctricos y de combustión.
El voltaje de un coche eléctrico es la tensión eléctrica nominal que hay en la batería principal. Varía de un modelo a otro situándose entre los 200 V a los 800 V.
Cuanto mayor sea, más autonomía va a tener el coche.
En este particular hay que precisar que un coche eléctrico suele contar con 2 tipos de batería:
La capacidad de la batería de un coche eléctrico, medida en kilovatios hora, determina la energía que puede almacenar y su autonomía.
Cuanto mayor sea la carga, mayor será la autonomía. Las baterías pueden cumplir hasta 3.000 ciclos de carga, según la tecnología. Lo habitual es que tengan una vida útil de 8 a 15 años, o 160.000 km.
La autonomía de la batería de un coche eléctrico es la distancia que puede recorrer el vehículo con una carga completa, antes de tener que cargarse.
Se encuentra condicionada por factores como el tipo de conducción, el clima, o el estado de la vía, entre otros factores.
Por otro lado, es preciso considerar elementos como la frenada regenerativa que aumenta la eficiencia energética de la batería al regenerar energía, reduce el desgaste de los frenos y genera menor impacto medioambiental.
El tiempo de carga de una batería varía en función del tipo de cargador del coche eléctrico, de la capacidad de la batería o de la potencia máxima del coche.
Existen diferentes tipos de cargas: lenta, rápida, semirrápida y ultrarápida, esta última puede tardar en cargar tu coche eléctrico apenas unos minutos.
Se trata de un factor elemental que debes analizar para planificar tus desplazamientos.
Uno de los grandes retos en los que se ha trabajo en los últimos años es el del reciclaje de las baterías, ya que su vida útil se sitúa entre los 8 y 15 años como hemos visto hace unas líneas.
Pueden ser reutilizadas, por ejemplo, en el almacenamiento de energías renovables, entre otros usos menos exigentes.
Los tipos de baterías de coches eléctricos merecen una mención aparte, ya que cada uno de ellos se adapta a las necesidades de rendimiento, autonomía y precio.
Estas son las tecnologías más habituales en los coches eléctricos (EV):
Si estás pensando en invertir en uno e instalar un punto de carga en tu vivienda, ten presente que la tarifa que te ofrezca tu suministradora va a resultar determinante en tu factura de la luz.
Las baterías de coches eléctricos son elementos claves cuyas características es preciso conocer. Influyen en el precio del coche y su autonomía.
La vida útil y costes de una batería de coche eléctrico dependen de su tecnología y del uso. Al cabo de los años pierden parte de su capacidad de carga.
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