08/10/24
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Recuperador de calor: qué es, cómo funciona y beneficios
Un recuperador de calor es un sistema de ventilación automática que permite aumentar la eficiencia de los sistemas de climatización al recuperar la energía del aire expulsado al exterior y transmitirla al aire que se introduce en la vivienda.
Estos aparatos, cuyo funcionamiento viene determinado por el tipo de intercambiador que los componen, aumentan la calidad del aire creando espacios más saludables y sostenibles.
Ante la importancia actual del control energético a nivel doméstico para reducir el consumo, y a nivel medioambiental optando por sistemas de climatización eficientes, vamos a hablarte de qué es un recuperador de calor, cómo funciona y qué beneficios puedes obtener de él.
¿Qué es un recuperador de calor?
Un recuperador de calor es un dispositivo compuesto por un intercambiador de alta eficiencia y ventiladores cuya finalidad es airear una vivienda o un edificio de manera controlada y automatizada, además de recuperar el calor que proviene del aire interior antes de desecharlo. Este proceso busca reducir las pérdidas de energía y el consumo energético.
Los recuperadores de calor en instalaciones de climatización se convierten en intercambiadores térmicos que aprovechan el calor sensible –es el caso de los recuperadores de calor térmico– y el calor latente residual –gracias a recuperadores de calor entálpico–.
Gracias a este método, los técnicos pueden optimizar las instalaciones energéticas, uno de los pilares de las llamadas passivhaus o casas pasivas altamente eficientes, atendiendo a las pautas siguientes:
- Análisis previo de la viabilidad de poder consumir la energía recuperada.
- Cálculo del ahorro previsto frente al coste de inversión del sistema.
- Identificación de los puntos de recuperación de calor y los puntos de consumo de energía.
- Estimación de las emisiones de CO2 evitadas.
Estos pasos forman parte del análisis previo necesario para la inclusión de un sistema de ventilación interior de doble flujo por conductos.
¿Cómo funciona un recuperador de calor?
El funcionamiento de un recuperador de calor se basa en el intercambio de calor entre el volumen de aire de extracción, ya climatizado, y el volumen de aire de admisión, sin climatizar. En otras palabras, impulsa el aire exterior hacia el interior y expulsa el aire viciado del interior hacia el exterior.
A lo largo de todo el proceso te beneficias de 4 funciones:
- Renovación del aire interior sin pérdida de energía y de gran calidad gracias al filtrado al que es sometido.
- Precalentamiento del aire para reducir el consumo energético en invierno.
- Preenfriamiento del aire mediante la función bypass para reducir el consumo energético en verano.
- Eliminación de las condensaciones que surgen en el proceso de intercambio de energía.
La mayoría de los recuperadores de calor que se instalan tanto en viviendas como en locales son de aire-aire combinados con sistemas de climatización. Esencialmente los tipos de intercambiador de que están compuestos son:
- De flujo cruzado. La energía térmica se intercambia a través de los paneles que lo componen. El intercambio de calor es corto, ya que uno de los fluidos fluye de manera perpendicular al otro.
- De flujo paralelo. El tiempo de intercambio es mayor puesto que los fluidos circulan en paralelo aumentando, por otro lado, la eficacia energética.
- Rotativo. Se compone de una rueda cubierta por una carcasa dividida en 2 semicírculos con un haz de conductos paralelos. Gracias al motor eléctrico que la acciona permite controlar el intercambio de calor. Este sistema facilita el control de la humedad porque permite recalentar el aire de impulsión con el objetivo de deshumidificarlo.
¿Qué ventajas proporciona un recuperador de calor?
El recuperador de calor es un sistema pensado para potenciar la eficiencia energética de los inmuebles y las viviendas, creando así espacios más sostenibles sin renunciar a la calidad del aire.
Por este motivo, entre las ventajas principales que ofrece se encuentra la reducción de los costes de inversión y el ahorro de energía, aunque hay muchas más de las que te puedes beneficiar.
Reducción de los costes de inversión
Dado que el recuperador de calor va a optimizar el funcionamiento de los sistemas de climatización, estos pueden ser más compactos.
Eficiencia
El Real Decreto 178/2021 por el que se actualiza el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios(RITE) recoge una tabla sobre la eficiencia de la recuperación del aire de extracción donde se muestra que, dependiendo de las horas de utilización de los equipos y del caudal de aire, el nivel de eficiencia energética de estos equipos puede alcanzar el 75 %.
Ahorro de energía
Al reducir los costes de explotación, es decir, del consumo en funcionamiento, ahorras energía lo que se traduce por una disminución de tu factura de la luz, lo que por otro lado te permite contribuir a la protección del medioambiente al minimizar la emisión de gases de efecto invernadero.
Interiores libres de insectos
Como no necesitas abrir las ventanas para ventilar tu vivienda, evitas que se introduzcan en ella mosquitos, moscas, arañas o cualquier otro insecto.
Mejora de la calidad del aire
La ventilación con recuperador de calor te permite disfrutar de un aire limpio, sin bacterias, humedades o partículas suspendidas gracias a la acción de sus filtros que pueden ser de alta eficiencia como los HEPA (del inglés "High Efficiency Particle Arresting" ) de los que habrás oído hablar en la pandemia en cuanto al tratamiento del aire en interiores.
Llegado a este punto, si te preguntas cuándo es conveniente instalar un recuperador de calor, ten presente que de acuerdo con el reglamento de diseño ecológico establecido por ley para las unidades de ventilación, cuando el caudal de aire expulsado al exterior es superior a 0,28 m³/s, es necesario recuperar la energía del aire expulsado.
Del mismo modo, puedes instalar un recuperador de calor en tu vivienda para aumentar su eficiencia energética como has podido comprobar a lo largo de este artículo.
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