Gas

Revisión de la caldera de gas natural, ¿es obligatoria?

La revisión de la caldera de gas es obligatoria si buscas disfrutar de una manera segura del suministro y lograr el mayor rendimiento posible para tu caldera. Conocer al detalle cómo funciona o las implicaciones que pueden existir si no la realizas, así como si debes pagar o no a la empresa que la realice de manera directa son puntos que debes conocer. 

Piensa que el propietario de la instalación es el responsable de que la caldera se encuentre en perfectas condiciones, dado que solo así pueden evitarse fugas y funcionamientos incorrectos. 

Por esto que acabamos de mencionar, resulta de gran relevancia, tanto si tienes una caldera de gas como si estás pensando en instalarla, la información pormenorizada que te hemos preparado respecto a la obligatoriedad de las revisiones.

Consideraciones prácticas de la revisión de la caldera de gas 

La revisión de la caldera de gas es obligatoria para todas las instalaciones. Si no la realizas tras varios avisos, tu distribuidora puede cortarte el suministro. 

Ten presente que si tu caldera no pasa los controles oportunos, puede suponer un peligro para ti y para la vida de las personas que te rodean, y tú como propietario serás el responsable de lo que pueda ocurrir. Una caldera revisada, como marca la normativa, evita problemas de combustión o que se pueda bloquear la ventilación.

Aclarada esta primera consideración esencial, vamos a detallarte otras complementarias, aunque igualmente importantes. 

¿Cuándo es obligatoria la revisión de la caldera?

La revisión obligatoria de una caldera debe realizarse cada mes en el caso de las calderas de gas de más de 70 kW y cada 2 años las de hasta 70 kW –estás son las de uso doméstico–. 

De modo que, tal y como se recoge en el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios (RITE), las calderas domésticas se deben revisar cada 2 años y las de una comunidad, por ejemplo, mensualmente. En este último caso, es la comunidad quien debe contratar este servicio de revisión. 

Objetivos de las revisiones de gas

El objetivo de la revisión periódica de gas, es el de asegurar el correcto funcionamiento y el óptimo estado de la instalación de tu caldera para que sea eficiente, segura y durable. 

Las revisiones de gas permiten disfrutar de instalaciones en perfecto funcionamiento, además de que alargan la vida útil de tus equipamientos y detectan cualquier posible mal funcionamiento incipiente antes de que produzca algún daño mayor. 

¿Quién puede realizar la revisión?

La revisión la pueden realizar aquellas figuras profesionales que dispongan de los permisos necesarios.

A saber: 

  • La distribuidora. 
  • Una empresa cualificada de tu elección. 
  • Los fabricantes de calderas. 
  • Tu suministradora mediante un servicio que hayas contratado.  

Eso sí, en el caso de que la distribuidora no reciba el certificado de la revisión en los plazos estipulados, será ella quien envíe a un técnico homologado.

En cualquiera de los escenarios, el importe del servicio te llegará plasmado en la factura que te remite tu suministradora de gas. Esto es porque el pago, incluso en el caso de que tengas contratado un mantenimiento más amplio, es gestionado por la distribuidora, que posteriormente lo remite a la suministradora. 

Ten presente, para evitar estafas, que antes de que te visite cualquier técnico has tenido que recibir una notificación por carta de tu distribuidora con al menos 5 días de antelación a la fecha de ejecución, y que nunca debes pagar el servicio directamente al técnico o a la empresa encargada.

Precio de la revisión de la caldera

El precio de la revisión de la caldera varía dependiendo del tipo de servicio que contrates, si bien es cierto que las cifras rondan los 100 € para las revisiones de la caldera de gas, que, tal y como te hemos avanzado hace unas líneas, se te cobrarán a través de la factura del gas

El precio total comprenderá las piezas de repuesto, la mano de obra, el tiempo de trabajo y el desplazamiento.

Revisión caldera obligatoria

Diferencia entre revisión e inspección del gas

Aunque puedes haberlo oído utilizado indistintamente, la revisión del gas se centra como mínimo en la caldera aunque lo que incluya exactamente depende de lo que la empresa te haya ofertado. 

Así las cosas, se suelen verificar los siguientes elementos: 

  • Estanqueidad. 
  • Combustión.
  • Circuito de humos. 
  • Quemador. 
  • Vaso de expansión.
  • Presión.
  • Sistemas de tratamiento de agua.
  • Sistemas de llenado.
  • Filtros de agua. 
  • Aislamiento.
  • Verificación del anticongelante. 

En lo que respecta a la inspección de gas o servicio de mantenimiento, este no es obligatorio, y puedes contratarlo como complemento para verificar el circuito de radiadores, purgarlos si es necesario y detectar posibles fugas de agua. 

A partir de un mínimo, las coberturas pueden ser muy variadas y dependen del contrato de mantenimiento que tengas contratado.

3 cuestiones a tener en cuenta con respecto a la revisión de la caldera de gas

Como complemento de la información que hemos ido abordando a lo largo de este artículo, queremos compartir contigo 3 consejos que te pueden ir bien en lo que respecta a las revisiones e inspecciones de gas:

  1. Si quieres que se revise tu instalación completa, radiadores y quemadores de la cocina incluidos, asegúrate en detalle de lo que incluye el servicio de la empresa contratada. 
  2. Si no lo tienes, valora contratar un servicio de mantenimiento de gas que incluya una inspección más extendida de todos los elementos de tu instalación para conseguir el mayor rendimiento posible. Las empresas suministradoras de gas suelen tener ofertas disponibles. 
  3. Si a lo largo de la revisión el técnico detecta anomalías, intentará repararlas. Si no lo consigue, por seguridad precintará la caldera de gas y cortará el suministro. Para que sea reactivado, debes subsanar los fallos y enviar el certificado correspondiente.
Publicado el