Deflector

El deflector es una pieza que se utiliza en la parte final de la salida de humos de una instalación de gas con el fin de garantizar la correcta evacuación de los gases residuales que se producen en la caldera.

¿Qué es un deflector?

El deflector de gas natural –también conocido como sombrerete– es una pieza de tipo cilíndrico fabricada en aluminio o polipropileno que se coloca en la parte final de la salida de humos de una caldera o calentador de gas. 

Cabe recordar que la chimenea o tubería de salida de humos de la instalación de gas natural es la salida al exterior necesaria para expulsar el vapor de agua y los gases residuales que se producen en la combustión del gas en la caldera, mayoritariamente dióxido de carbono (CO2) y óxidos de nitrógeno (NOx).

Según la normativa española, la salida de humos debe hacerse preferentemente por la cubierta del edificio (el tejado), aunque la norma permite hacerlo a través de la fachada o patio de ventilación, en caso de fincas ya existentes.

¿Para qué se usa un deflector en una salida de gas?

El deflector cuenta con varias aberturas dispuestas de forma alterna que son capaces de modificar la dirección del fluido o de la corriente que circula en su interior. 

Así, su principal función es impedir que, debido a los cambios en la dirección del viento, se cree un contraflujo que pueda empujar el humo y los gases nuevamente hacia el interior del inmueble.

Por tanto, estos son los dos objetivos principales del deflector:

  • Garantizar la correcta evacuación al exterior de los gases residuales de la combustión de la caldera de gas.

  • Evitar que estas emisiones contaminantes puedan entrar en nuestra vivienda o local.

De paso, el reflector evita que se introduzca el agua, los pájaros o cualquier otro cuerpo extraño.

¿Qué dice la normativa sobre salida de humos y uso de deflectores?

Como hemos visto, las calderas de gas, sobre todo las de condensación, expulsan gases y vapor de agua. Por ello, requieren de una salida de humos que asegure que los gases producto de la combustión del gas puedan evacuarse correctamente.

En España, el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios –RITE– es el que determina las condiciones de eficiencia energética y seguridad que deben cumplir las instalaciones térmicas y de higiene de los edificios, y por tanto, las instalaciones de gas. 

El RITE convive desde 2015 con las Directivas Europeas de Ecodiseño (ErP) y Etiquetado (ELD) y con la Normativa UNE 60670.

La normativa afecta sobre todo a la ubicación y distancia mínima respecto al resto de elementos del inmueble y edificios vecinos respecto a las salidas de humos de una caldera y al uso de deflectores.

Vamos a repasar las principales directrices existentes.

Para todas las viviendas

En todas las viviendas, las salidas de los sistemas de evacuación de gases deberán cumplir con las siguientes distancias mínimas respecto al resto de elementos del inmueble:

  • 3 m de distancia respecto a otra pared frontal vecina, si tiene ventana o huecos de ventilación.

  • 2 m de distancia respecto a otra pared frontal vecina, si no tiene ventana o ventilación.

Si la salida de humos cuenta con deflactores que orienten los gases en otra dirección, estas distancias podrían ser menores: 2,2 m y 1,5 m, respectivamente.

Además, el tubo de evacuación deberá guardar las siguientes distancias: 

  • 60 cm con cualquier otra salida de productos de la combustión situados al mismo nivel.

  • 40 cm con cualquier abertura permanente de entrada o salida de aire: rejillas de aireación, ventanas o puertas de la misma vivienda o local, se encuentren en un nivel superior o colindante.

  • 40 cm con cualquier ventana o puerta de un inmueble distinto al de la salida de gas.

  • 40 cm con cualquier pared lateral externa, cornisa o alero.

  • 20 cm respecto a cualquier otro resalte.

  • 10 cm respecto al muro, esto es, deberá sobresalir al menos esta distancia de la pared que ha atravesado.

Cuando por cualquier razón no se pueda respetar la distancia mínima de 60 cm entre dos salidas de humos o la de 40 cm con otras ventanas o puertas en edificaciones ya construidas, el uso de deflectores divergentes ayudará a desviar el flujo de los productos de la combustión. La separación mínima, eso sí, nunca deberá ser menor de 30 cm en el caso de dos salidas de humos y de 20 cm si se trata de ventanas o puertas. 

En viviendas ubicadas en pisos o casas adosadas

En las viviendas ubicadas en pisos o casas adosadas, las salidas de humos en la fachada o patio de ventilación tienen que estar aprobadas por la comunidad y deben ubicarse a una altura mínima de 2,20 m (metros) respecto al nivel del suelo de la finca.

En viviendas unifamiliares independientes

Por su parte, en las viviendas independientes, la salida de humos podrá hacerse tanto a través de la cubierta como de la fachada, siempre que se cumpla el mínimo de 3 metros de distancia con los vecinos.


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